
Rubén Basoalto el pulso firme del rock nacional
ritmo y climas únicos
Un 9 de julio de 1947 nacía en Buenos Aires Rubén Basoalto, uno de los bateristas más sólidos y representativos del rock argentino. Conocido por ser miembro fundador de Vox Dei, Basoalto fue parte activa de una revolución musical que transformó para siempre la escena nacional. Su estilo sobrio pero poderoso fue el corazón rítmico de una banda que, desde finales de los años 60, supo plantar bandera en tiempos donde todo estaba por inventarse.
Desde sus comienzos, Rubén se destacó por una capacidad técnica que combinaba potencia con precisión, y por una actitud serena pero firme en el escenario. Su batería no solo marcaba el ritmo: generaba climas, abría caminos, sostenía con convicción las ideas musicales de una banda que supo incursionar en el rock progresivo, el blues y la psicodelia. En un género que muchas veces miraba hacia afuera, Basoalto se convirtió en una referencia local, sin perder nunca su identidad.
Vox Dei fue pionera en editar un álbum conceptual como La Biblia (1971), y allí el trabajo de Basoalto resultó clave. Su desempeño aportó profundidad y matices en una obra ambiciosa, cargada de momentos intensos y pasajes introspectivos. No fue casualidad que, a lo largo de los años, se convirtiera en el único integrante de Vox Dei que permaneció en todas sus formaciones, desde su fundación en Quilmes en 1967 hasta sus últimos shows.
Pero más allá de los discos y las giras, Rubén Basoalto fue uno de esos músicos que supo encarnar el espíritu del rock nacional desde un lugar honesto y comprometido. Nunca buscó protagonismo, pero su presencia era ineludible. Siempre detrás de los parches, firme, generoso y constante, fue una figura respetada por colegas y adorada por el público, que lo reconocía como una parte esencial de una época inolvidable.